Bélgica ha implementado un nuevo sistema con el propósito de reducir las cifras de abandono en la calle y ofrecer seguridad a los recién nacidos.
Por lo que la oenegé Corvia fue autorizada a realizar el primer buzón para “depositar” a los bebés no deseados de manera anónima en el distrito de Evere en Bruselas.
Además el buzón cuenta con características especiales donde la madre tendrá que empujar la puerta verde y una vez abierta adentro encontrará un diseño en forma de cuna con calefacción para que deje el bebé.
Es de resaltar que una vez que la puerta del buzón sea cerrada con el bebé adentro, esta quedará bloqueada de inmediato, sin embargo un conserje es avisado mediante una alarma para que dé aviso a un médico que revise el estado de salud del recién nacido y luego proceda a dar aviso a las autoridades respectivas.
Asimismo el buzón tiene en su interior una pieza única de un rompecabezas que la madre biológica podrá tener para identificar a su hijo más adelante si así lo desea, además tendrá la opción de dejar sus datos.