Pese a los inconvenientes que surgieron a raíz de la pandemia de COVID-19, el Impact logró convertirse en el primer equipo deportivo profesional de Canadá en jugar con público desde marzo.
Desde la interrupción de los juegos de la MLS, los fanáticos tuvieron que hacerse a la idea de no volver al campo de juego a presenciar los espectáculos debido al riesgo que suponen los encuentros en estos momentos de crisis sanitaria, sin embargo, el Impact pudo jugar nuevamente frente a los fanáticos.
"Es mejor que cuando no hay nadie...Los escuchamos. Nos animaron. Era importante tenerlos. Apoyaron a los jugadores hasta el final”, dijo Thierry Henry, entrenador del equipo luego de que se llevará a cabo su primer partido con este rol en Saputo Stadium, en donde Montreal Impact se llevó la victoria por 2-0 sobre los Vancouver Whitecaps el martes por la noche frente a 250 espectadores.
Aunque el estadio cuenta con cientos de asientos, el máximo permitido de acuerdo a las pautas de salud pública de Quebec es de 250 personas, las cuales fueron acomodadas en ocho gradas separadas en 20.801 asientos. Asimismo, los fanáticos tuvieron que seguir una serie de protocolos como revisión de la temperatura y el uso de tapabocas mientras permanecieran al interior del estadio.
Sin importar la presencia de pocos fanáticos en el estadio, esto significó mucho para los jugadores, animándolos a ganar el juego y dejar todo su esfuerzo en el campo.
El momento también contó con otros espectadores que se reunieron fuera del recinto, cantando, tocando tambores y haciendo estallar bombas de humo mientras gritaban al unísono.