Un gran incendio forestal continúa amenazando a Red Lake, Ontario, ubicada a unos 550 kilómetros de Thunder Bay.
El temor más grande es que las poderosas llamas alcancen la comunidad. Cerca de 3.800 habitantes han abandonado el municipio hasta el miércoles y alrededor de 500 residentes aún siguen en el área.
Se han establecido refugios y alojamientos para los evacuados en Thunder Bay, Fort Frances, Dryden, Kenora y en toda la región mientras las autoridades siguen instando a evacuar hasta que sea seguro regresar.
Tan solo el martes, se informó que el incendio cubrió 750 hectáreas y este estaba a solo dos kilómetros de Red Lake, sin embargo, el jueves las autoridades anunciaron que el incendio cubría unas 550 hectáreas, una disminución importante que deja cabida a la esperanza para socavar el fuego.
Por su parte, los bomberos del área se han preparado para otro día desafiante debido a los patrones cambiantes del viento y las condiciones secas que dificultan en gran medida su labor.
Según Ministry of Natural Resources and Forestry (MNRF), los avances anunciados sobre el incendio pueden verse afectados por los vientos del suroeste, lo que representa un gran riesgo para la ciudad, ya que estos podrían volver a soplar el fuego en su dirección.
El ministerio ha desplegado maquinaria pesada para combatir el voraz incendio, incluidos ocho helicópteros que apoyan a los equipos de tierra, arrojando agua a los bordes del incendio. Alrededor de 800 cargas se han arrojado al fuego, lo que suma cinco millones de litros de agua.
De acuerdo con las declaraciones del alcalde de Red Lake, Fred Mota, la OPP y el MNRF están haciendo un "trabajo tremendo" utilizando todos los recursos disponibles, no obstante, para extinguir el incendio todavía hay un "camino por recorrer".
"Esperamos que pasen dos fuertes tormentas en las próximas horas, que traerán rayos acompañados de ráfagas de viento de hasta 110 km/h...Tenemos la esperanza de que la madre naturaleza trabaje a nuestro favor", dijo Mota haciendo referencia a los pronósticos meteorológicos que señalaban lluvia en el área el jueves por la noche.
El alcalde también mencionó que el incendio ha provocado que Buffalo y Madsen pierdan energía. Por lo pronto, el paso principal de entrada y salida de la ciudad, la autopista 105, permanece abierta para el tráfico en dirección sur, pero la autopista 618 en el área de Madsen aún permanece cerrada.