El gobierno conservador progresista dio por finalizado el contrato con la organización, The Beer Store, permitiendo la pronta venta de cerveza y vino a cientos de tiendas de comestibles.
Según su proceso, el gobierno presentó una legislación el día lunes 27 de mayo, que terminaría con los 10 años pactados, declarando el primer ministro Doug Ford, la gran conveniencia que se tendría al expandir la venta de cerveza y vino a tiendas de comestibles, para así dinamizar la economía y terminar con los monopolios.
Así mismo, el Ministro de Finanzas, Vic Fedeli, afirmó que: "El sistema de distribución de cerveza actual de la provincia es propiedad de tres gigantes globales que han firmado un contrato especial con el gobierno anterior y están más interesados en proteger las ganancias que en la conveniencia o elección de los ciudadanos promedio".
Sin embargo, The Beer Store, aclaró que no renunciaría a ningún tipo de reclamación de compensación financiera, puesto que recurrirá a los tribunales, enviando una carta al Procurador General, informando que se reservan el derecho de demandar la factura por una indemnización.
A su paso, la compañía se ha adentrado a una campaña publicitaria, teniendo como eje principal el rechazo a la compra de cerveza en las tiendas de la esquina.
Por otro lado, los conservadores anunciaron una serie de restricciones del consumo de alcohol, entre las que se incluye permitir que se sirva alcohol a las 9 am, los siete días de la semana, dejar que las personas consuman alcohol en los parques y legalizar las fiestas de cerca de eventos deportivos.
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