El martes 4 de agosto sucedió una fuerte explosión en el puerto de Beirut, donde al menos 80 personas murieron y 4.000 resultaron heridas, así lo manifestó esta mañana el ministro de Salud del Líbano, Hamad Hassann durante una entrevista para uno de los canales de televisión nacional de Líbano.
Asimismo Hassan expresó que cuatro hospitales se encuentran fuera de servicio debido a los daños causados por la explosión y que la cifra de decesos probablemente aumente con el pasar de los días.
De igual forma testigos presenciales señalaron que hubo rotura de vidrios en viviendas que se encontraban a más de cinco kilómetros de la explosión y de edificios que estaban a tan solo dos kilómetros de distancia los cuales sufrieron daños mayores, sin embargo, los barrios céntricos de la capital libanesa también se vieron perjudicados.
Y es que se cree que la causa de esta terrible explosión se debe a “materiales altamente explosivos confiscados desde hace años”, sin embargo, la naturaleza exacta del incidente la determinara la investigación que se lleva a cabo, así lo manifestó Albas Ibrahim, director general de la Seguridad General.
Sin duda un terrible suceso que ha sido catalogado por el Ministerio de Salud del Líbano como una “catástrofe en todos los sentidos” razón por la que el país hoy tendrá un día de luto nacional que dejó a varias víctimas a su paso.
Por lo que, el presidente libanés Michel Aoun, afirmó que la misión de la célula de crisis creada tras la explosión es “hacer frente a las repercusiones del desastre y coordinar de cerca con las autoridades”.
Por su parte Diab prometió que no descansará hasta encontrar al responsable y “aplicarle el castigo máximo, porque no es aceptable que una carga de nitrato de amonio que pesa 2.750 toneladas este desde hace seis años en un almacén sin tomarse las medidas preventivas, exponiendo la seguridad de los ciudadanos”.