Evie Toombes, una chica británica de 20 años que sufre de espina bífida, un defecto congénito que ocurre cuando la columna vertebral y la médula espinal no se formar correctamente, está demando al ex médico de su madre, por millones de dólares por negligencia médica y por haberla dejado nacer con esa condición. La mujer afirma, que si el medico hubiera hecho su trabajo correctamente, ella no habría nacido.
Debido a la enfermedad de Evie, está obligada a tomar fisioterapia diaria durante un máximo de 3 horas, depende de un catéter para usar el baño y debe ser alimentada por un tubo debido a sus problemas estomacales. Es por esto, que Evie quiere millones de dólares del Dr. Philip Mitchell, según ella, por no haberle aconsejado a su madre que tomara un suplemento que podría haber prevenido el defecto congénito, ella asegura que si a su madre le hubieran dicho que tomara los suplementos, entonces el embarazo se habría retrasado hasta haberlos tomado.
La madre de Evie, que vio al Dr. Mitchell en febrero de 2001, dice que sí se habló de los suplementos, pero, que el doctor no mencionó nada sobre la importancia del ácido fólico para prevenir la espina bífida. Evie, está segura que si no fuera por la ‘negligencia’ del médico, ella nunca habría sido concebida, y que su daño y discapacidad son por culpa del doctor. En su defensa, el Dr. Mitchell niega rotundamente las acusaciones y asegura que sí dio un consejo razonable a la madre.
A pesar de la condición de Evie, ha logrado ser muy exitosa en su carrera de saltos a caballo, además de ser una autora publicada, en 2018 ganó el premio Inspiration Young Person Award en un evento benéfico, también, fue galardonada con un premio y una medalla juvenil de Ciudadano Británico.
Texto: Redacción El Megáfono Canadá