Al poco tiempo de la llegada de las nuevas placas, las opiniones sobre su mala calidad iniciaron el debate en redes sociales, luego el epicentro de la discusión paso a ser lo ilegibles que son las placas.
Ante la situación, The Ministry of Government and Consumer Service dijo que iniciaría una investigación luego de que se publicaran distintas fotografías que evidenciaban que las nuevas placas no se pueden leer claramente en escenarios oscuros o bajo el resplandor de los faros de los vehículos al transitar, lo que supone un gran problema para los conductores, la policía y las cámaras de radar.
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Recordemos que después de tantos meses de ajustes, la provincia comenzó a desplegar las nuevas placas desde el primero de febrero que según anunció el gobierno, estás fueron hechas con láminas de alta definición haciéndolas más fuertes, brillantes y duraderas. Sin embargo, las nuevas placas tendrán que ser reemplazadas.
Por su parte, el gobierno provincial finalmente admitió que había "un problema" con la fabricación de las placas que estuvieron a cargo de la compañía 3M, para luego anunciar el retiro oficial de estas desde el 20 de febrero.
A través de un comunicado, la ministra del Gobierno y Servicios al Consumidor, Lisa Thompson, anuncio el desarrollo de una versión "mejorada" de la nueva placa, la cual estará lista en tres semanas aproximadamente.
Esta mejorada versión será enviada por correo a los conductores que actualmente tienen las placas defectuosas.