La abrumadora situación económica en Toronto ha llevado a que refugiados ucranianos, que llegaron a Canadá huyendo del conflicto con Rusia, contemplen la posibilidad de regresar a su país de origen debido a los elevados costos de vida en la ciudad.
A pesar de enfrentar una zona de guerra en Ucrania, muchos refugiados se han encontrado con que los precios de alquiler, vivienda y alimentos en Toronto son insostenibles.
Según testimonios recogidos por CBC, el alto costo del alquiler, sumado a los elevados precios de los alimentos y otros aspectos de la vida cotidiana, ha llevado a que un cinco por ciento de los refugiados ucranianos en el Área Metropolitana de Toronto considere regresar a su país en medio del conflicto.
Otro 39 por ciento se encuentra indeciso, enfrentando la realidad de los bombardeos en Ucrania y la persistente crisis económica en Canadá.
La difícil elección entre los desafíos económicos en Toronto y la situación de conflicto en Ucrania refleja la urgente necesidad de abordar la asequibilidad y calidad de vida en la ciudad canadiense.
Mientras tanto, el dilema de los refugiados ucranianos ilustra cómo la alta carga financiera puede influir en decisiones personales, incluso en circunstancias extraordinarias.